La historia de cómo Piedad Córdoba llegó a ser conocida como la “madrina” de Alex Saab en Venezuela

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Cocky de la Torre
La Torre de Venezuela

La exsenadora colombiana Piedad Córdoba ha negado reiteradamente tener o haber tenido negocios con Alex Saab. No obstante, personas familiarizadas con el asunto aseguran que Córdoba hizo posible los primeros acercamientos del empresario colombiano con el Gobierno del entonces mandatario venezolano Hugo Chávez y que de allí surgiría una amistad que llevaría a la excongresista a realizar viajes en algún momento con Saab y con su socio Álvaro Pulido.

Córdoba ha reconocido que su amistad con Saab surgió gracias a que ambos y el padre del empresario eran afines a la causa Palestina en Colombia.

Piedad Córdoba realizó gestiones para que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberaran de su cautiverio a la excandidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt, con el aval del Gobierno francés, pues Betancourt es ciudadana colombo-francesa. A cambio, según ha dicho una persona familiarizada con el asunto, la exsenadora habría solicitado visas de residentes en Francia para Alex Saab y varios miembros de su familia, incluida Cynthia Certain, quien en ese entonces era la esposa del barranquillero.

Gracias al afianzamiento de la amistad, Córdoba habría realizado varios viajes de placer y compras a París-Francia donde la familia de Alex Saab le serviría de anfitriones.

Una fuente consultada señala que Alex Saab, luego de haber quebrado sus empresas en Colombia, tomó provecho de su relación con la entonces senadora Piedad Córdoba, entre los años 2010 y 2011, cuando Córdoba empezó a ser definida como su “madrina”, luego de haber hecho contacto a través de un grupo, por medio del cual Saab conocería a quien después se convertiría en su socio, Álvaro Pulido, quien tenía por nombre Germán Rubio antes de cambiar de identidad en Colombia.

En la sociedad, Pulido fungiría como ejecutor y Saab como el hombre de los contactos. A través de Córdoba ambos lograrían llegar hasta Chávez. Esto llevaría también a Córdoba a reunirse en varias oportunidades y realizar vuelos con ambos hombres de negocios.

Después del contacto inicial con el Gobierno de Chávez, Saab se valería por sus propios medios, creciendo en sus negocios y fortaleciendo sus lazos con el Gobierno chavista, por lo que desde entonces no tuvo necesidad de acudir a los buenos oficios de la exsenadora, quien se apartó después de entender cómo empezaron a fluir las relaciones entre Saab y el chavismo.

La fuente consultada, no obstante, afirma no poder validar que Córdoba haya tenido o no beneficios de su relación con Saab, siendo su función la de haber hecho el enlace entre el empresario y el Gobierno de Chávez, con el simple propósito deayudar a Saab en sus negocios.

Acerca del particular éstas fueron sus palabras, en una entrevista concedida por Córdoba al diario colombiano El Tiempo en junio pasado.

¿Cuál es su nexo con Alex Saab?

Realmente conozco a Alex. Lo conocí en una campaña para la presidencia, en un almuerzo. Nos invitaron gente que era del Partido Liberal. Más que todo por el lado del papá de Alex Saab, una persona muy reconocida en Barranquilla, que la quiere mucho la gente. Además, está un tema muy especial que es el palestino. Luego, me lo encontré en Caracas. En Venezuela hay una muy fuerte organización de los palestinos. Pero realmente frente a todas estas cosas que están pasando no tengo nada que decir. Yo no hago parte de eso, ni tengo contratos ni mi familia, en absoluto.

¿En qué campaña presidencial en Colombia coincidieron?

En la campaña de Horacio Serpa, que nos invitaron a un almuerzo, una persona santandereana muy amiga de nosotros y ahí fueron todos ellos. Pero no te puedo garantizar que si a Horacio Serpa le preguntan él sepa quién es. Fue una cosa muy fugaz en Barranquilla.

Saab le dijo a El Tiempo en una entrevista que la consideraba una amiga. ¿Por qué se habrá referido así a usted?

Por una razón muy sencilla. Una cosa es distinguir a una persona y otra cosa es tener la amistad. Si tú me preguntas dónde queda la oficina de Alex en Venezuela, no tengo ni la menor idea, no sé dónde vive. Jamás fue más de lo que pasó en esos días en la campaña de Horacio; no he tenido ninguna relación. Una vez, que yo estaba en el ‘Rincón Latino’, en un evento que programó el padre Hoyos, el papá es una persona muy querida en Barranquilla y ahí nos fueron a saludar. Eso fue todo. Yo no tengo ni negocios ni contradicciones con él. Y no tengo absolutamente nada que ver. Lo que sé en este momento es lo que han sacado los medios.

¿Conoce a Álvaro Pulido, socio de Saab, a quien algunos relacionan con usted?

No lo conozco, en mi vida lo he visto. Además, es absurdo quienes dicen que es sobrino mío. En mi familia no hay nadie de apellido Pulido. No tengo ni la menor idea de quién es Álvaro Pulido. Y no tengo ese tipo de negocios y de relaciones en Venezuela. Yo hago política, voy a foros, a eventos, a todo lo que se organice, pero no sé quién es él.

¿Y con Saab solo esos episodios?

No. Fuera de eso, yo era la presidenta del Comité ProPalestina en Bogotá. Su papá tiene una trayectoria a favor de Palestina. Pero yo nunca hice política con Alex, yo no tengo negocios con Alex.

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