Cocky de la Torre
La Torre de Colombia
Una figura del ámbito legal colombiano ha ofrecido supuestamente a la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) entregar al empresario Alfonso “El Turco” Hilsaca Eljaude, por sus presuntos nexos con el narcoparamilitarismo. Hilsaca ha sido procesado en Colombia por homicidio y extorsión agravada.
El propósito de la entrega de Hilsaca a la DEA sería el de evitar que su delator no sea enjuiciado por crímenes en los Estados Unidos, relacionados con lavado de dinero, tanto de “El Turco” como de Alex Saab, a quien también pudieran canjear por un acuerdo de delación que respete los dineros que el testigo ocultaría en paraísos fiscales, principalmente en Bahamas, donde el mismo acabaría de pasar una larga temporada.

La extradición de “El Turco” estaría por ser solicitada a Colombia.
Y aunque se manejan nombres de posibles testigos, en el tema tiene especial relevancia Abelardo De La Espriella, por ser abogado de Hilsaca y Saab. Hilsaca, con la mediación del abogado, tendría nexos comerciales con los hijos del expresidente colombiano Álvaro Uribe. En algunos negocios contarían con asesorías para la conformación de sociedades en los Estados Unidos y en jurisdicciones que forman parte de las listas internacionales de paraísos fiscales, usualmente asociadas al blanqueo.
En Colombia prevalece el dilema de si los Uribe correrán la misma suerte que “El Turco” y Saab, pues pudieran ser también entregados por el posible testigo.

El abogado De La Espriella dejó de aparecer en Miami fotografiado junto al narcotraficante Jorge Luis Hernández Villazón, alias “Boliche, primo hermano del difunto narcotraficante José Hernández Aponte, alias “Ñeñe” Hernández, protagonista de un escándalo de compra de votos en las elecciones que llevaron a Iván Duque a la presidencia de Colombia, escándalo conocido como la “Ñeñe-Política”. Una enemistad surgida sería el motivo del alejamiento entre el abogado y alias “Boliche”.

“Boliche” aceptó los cargos en los Estados Unidos y decidió colaborar con la DEA, permitiéndose así poder seguir permaneciendo en Miami.
La relación de alias Boliche y De La Espriella con la asesoría de empresarios acusados de narcotráfico y blanqueo tanto en Colombia como en Venezuela, parece ser motivo suficiente para que la DEA y el FBI se conviertan en su sombra, en su permanente búsqueda de testigos y soplones que conduzcan a nuevas entregas de criminales.
Alias Boliche y De La Espriella tenían a su cargo una oficina en Miami, que hoy se encontraría abandonada. Se presume que desde la creación de la oficina, el FBI había puesto especial cuidado a las relaciones de ambos personajes.

Todo lo anterior orbitaría muy de cerca alrededor de Alex Saab, cuya caída pudiera descalabrar no solo a la administración madurista en Venezuela, sino también al uribismo. Algunos creen que una ruptura de De La Espriella, con Saab y Uribe, pudiera sacar a flote muchas escandalosas verdades acerca de negocios y relaciones propias de cada uno de los dos últimos.
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